EL GRITO DE DOLORES Y EL PRINCIPIO DE LA GUERRA POR LA INDEPENDENCIA DE MÉXICO

México celebra su Independencia el 16 de septiembre, conmemorando la madrugada del 16 de septiembre de 1810, cuando el cura Hidalgo (don Miguel Hidalgo y Costilla) convocó, al repique de las campanas de su iglesia, al pueblo de Dolores Hidalgo Cuna de la Independencia Nacional (en el actual estado de Guanajuato), a levantarse en armas en contra del dominio español.

El hecho se conoce como “El Grito de Dolores” y marca el principio de la Guerra de Independencia, que terminaría 11 años después, con la entrada triunfal a la Ciudad de México del Ejército Trigarante, encabezado por Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero, en Ciudad de México.

Ese día estalló la revolución social de la que nacería México como Nación independiente, libre y soberana.

El 27 de septiembre de 1821, con la entrada del Ejército Trigarante a la capital, culminaba la Independencia de México, tras una guerra de once años que fue una gran revolución popular para librarse del dominio español.

Una masiva revolución popular, en la que decenas de miles de indígenas, de afro descendientes, de mulatos, de mestizos, campesinos, mineros y rancheros, hombres y mujeres, engrosaron las filas insurgentes siguiendo al llamado del cura Miguel Hidalgo y Costilla y, en algunos meses, conformaron un ejército popular que hirió de muerte al régimen colonial y desmanteló un sistema social opresivo y excluyente.

La lucha encabezada por Hidalgo y continuada por José María Morelos fue un movimiento libertario y justiciero.

La ceremonia del Grito fue instaurada en 1845, por el entonces presidente Antonio López de Santa Anna, para recordar al cura Hidalgo y a los héroes que lucharan por la Independencia; disponiendo entonces que se realizara cada 15 de septiembre a las 23:00 horas.

 

28 DE SEPTIEMBRE DE 1821: FIRMA DEL ACTA DE INDEPENDENCIA DEL IMPERIO MEXICANO

El Acta de Independencia del Imperio Mexicano es el documento mediante el cual el Imperio Mexicano declaró su independencia del Imperio español. El documento fundador del Estado Mexicano fue redactado en el Palacio Nacional de la Ciudad de México, el 28 de septiembre de 1821 por Juan José Espinosa de los Monteros, secretario de la Suprema Junta Provisional Gubernativa.

La tarde del 28 de septiembre, los miembros de la Junta se reunieron en el Palacio Nacional para redactar el Acta de Independencia de la nueva nación independiente.

Los dos documentos o actas resultantes fueron entonces redactados en su forma final por Juan José Espinosa de los Monteros, el secretario vocal de la Junta.

Las actas fueron firmadas por 33 de los 38 miembros de la Junta, junto con Iturbide en su calidad de presidente de la Regencia. Juan O'Donoju, último Jefe Político Superior de Nueva España, Francisco Severo Maldonado, el licenciado Don José Domingo Rus, José Mariano de Almanza y Miguel Sánchez Enciso no firmaron los documentos sino 'in absentia', aunque en el acta se escribió: Lugar de la firma de Juan O'Donoju y posteriormente su firma fue agregada en las copias impresas del acta, mas no fueron agregadas las firmas de los otros tres miembros faltantes que se creen ausentes por motivos de salud. Juan José Espinoza de los Monteros firmó dos veces en cada acta, una vez como miembro de la Junta y la segunda como vocal secretario, por lo que las actas contienen 35 firmas y el párrafo designado para O'Donoju. Una copia del acta fue para el gobierno y la otra para la junta, que fue la que posteriormente fue enviada a la Cámara de Diputados.

 

ACTA DE INDEPENDENCIA DEL IMPERIO MEXICANO, PRONUNCIADA POR LA JUNTA SOBERANA CONGREGADA EN LA CAPITAL EL 28 DE SEPTIEMBRE DE 1821

La Nacion Mexicana que, por trescientos años, ni ha tenido voluntad propia, ni libre el uso de la voz, sale hoy de la opresion en que ha vivido.

Los heroicos esfuerzos de sus hijos han sido coronados y está consumada la empresa, enteramente memorable, que un genio, superior á toda admiración y elogio, amor y gloria de su Patria, principio en Iguala, prosiguió y llebo al cabo, arrollando obstáculos casi insuperables.

Restituida, pues, esta parte del Septentrion al exercicio de cuantos derechos le concedió el Autor de la Naturaleza, y reconocen por inenagenables y sagrados las naciones cultas de la tierra; en libertad de constituirse del modo que mas convenga á su felicidad; y con representantes que puedan manifestar su voluntad y sus designios; comienza á hacer uso de tan preciosos dones, y declara solemnemente, por medio de la Junta Suprema del Imperio, que es Nación Soberana, é independiente de la antigua España, con quien en lo succesivo, no mantendrá otra unión que la de una amistad estrecha, en los términos que prescribieren los tratados: que entablará relaciones amistosas con las demas potencias executando, respecto de ellas, cuantos actos pueden y estan en posesion de executar las otras naciones soberanas: que va á constituirse con arreglo á las bases que en el Plan de Iguala y tratado de Cordoba estableció, sabiamente, el primer Gefe del Exercito Imperial de las Tres Garantias; y en fin que sostendra, á todo trance, y con el sacrificio de los haberes y vidas de sus individuos, (si fuere necesario) esta solemne declaracion, hecha en la Capital del Imperio á veinte y ocho de Setiembre del año de mil ochocientos veinte y uno, primero de la Independencia Mexicana”.

Agustin de Iturbide Antonio Obispo de la Puebla Lugar de la firma del S. Odonojú

Manuel de la Barcena Matías Moteagudo

José Yañez Juan Francisco Azcarate Juan José Espinoza de los Monteros

José Maria Fagoaga Jose Miguel Guridi y Alcocer

El Marqués de Salvatierra El Conde de Casa de Heras Soto Juan Bautista Lobo

Francisco Manuel Sanchez de Tagle Antonio de Gama y Cordova

José Manuel Sartorio Manuel Velazquez de Leon Manuel Montes Argüelles

Manuel de la Sota Rivas El Marqués de San Juan de Rayas

Jose Ignacio Garcia Illueca José María de Bustamante José María Cervantes y Velasco

Juan Cervantes y Padilla José Manuel Velazquez de la Cadena

Juan de Horbegozo Nicolás Campero El Conde de Jala y de Regla

José María de Echevers y Valdivielso

Luego de ser redactadas, una de las copias fue entregada a la Junta Provisional Gubernativa, la que posteriormente fue puesta en exposición en la Cámara de Diputados hasta 1909, cuando el incendio del recinto la destruyó.

La otra copia le fue entregada a la Regencia del Imperio, la cual permaneció en Palacio Nacional y fue robada en 1830. El canciller Lucas Alamán hizo esta referencia sobre el documento robado:

"No existe en la república más copia (manuscrita) que la que está en el salón de sesiones de la Cámara de Diputados; la otra fue vendida por un empleado infiel a un viajero curioso dando a parar en Francia."

 

Alamán solicitó recuperarla durante su periodo como canciller pero no lo consiguió aunque ofreció una suma considerable por ella.

Décadas más tarde, el acta fue adquirida por el emperador Maximiliano I, aunque se desconoce cómo y dónde la obtuvo. El Acta contiene en la parte trasera la figura del ex libris de la biblioteca de Maximiliano y fue sacada del país tras el fusilamiento del emperador por su confesor, Agustín Fischer.

Mucho tiempo después, el Acta apareció en España en la biblioteca del anticuario Gabriel Sánchez. También se desconoce como la obtuvo, pero es un hecho que la parte trasera del acta tiene el sello de la biblioteca del anticuario español. Sánchez vendió el documento al historiador mexicano Joaquín García Icazbalceta, quien la conservó y la heredó a su hijo Luis García Pimentel.

Florencio Gavito Bustillo, vivió en Francia y allá fue contactado por Luis García Pimentel, quien le ofreció venderle el Acta de Independencia. Tras comprarle el Acta por 10 mil pesos, regresó a México con la intención de entregar el acta él mismo al gobierno mexicano, pero falleció de leucemia en 1958. Gavito dejó expresado en su testamento el deseo que el Acta fuera entregada al Presidente de la República.

Así se hizo, cumpliendo su voluntad su hijo Florencio Gavito Jáuregui. Ahora, el documento está resguardado en el Archivo General de la Nación, en la delegación Venustiano Carranza, de la CDMX.

 ©Enrique F. Widmann-IberInfo_Buenos Aires

 

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