ERNESTO ‘CHE’ GUEVARA EXPONE ANTE LA ASAMBLEA GENERAL DE LAS NACIONES UNIDAS, EN 1964

Discurso pronunciado por Ernesto ‘Che’ Guevara, representante de Cuba, el 11 de diciembre de 1964 ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (19ª sesión, 1299ª reunión).

Registro histórico de la 'Memoria del Mundo', programa de la UNESCO dedicado a la salvaguardia del patrimonio documental.

 

 VIDEO:

 

"Nosotros queremos construir el socialismo; nos hemos declarado partidarios de los que luchan por la paz", aseguró Ernesto Guevara, en representación del Gobierno cubano.

Dos años habían pasado desde la llamada crisis de los misiles, cuando el argentino Ernesto "Che" Guevara, representante de Cuba ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), abogó el 11 de diciembre de 1964 en Nueva York por el fin del imperialismo y el inicio de la paz mundial.


 En la decimonovena sesión de la Asamblea General, Guevara resaltó "que Cuba no reconoce el derecho de los Estados Unidos, ni de nadie en el mundo, a determinar el tipo de armas que pueda tener dentro de sus fronteras".

En 1964, en la ciudad de Nueva York, el médico cubano - argentino Ernesto “Che” Guevara habla ante la Asamblea General de las Naciones Unidas. Durante su discurso un terrorista desconocido hizo un disparo de bazuca con una bazuca desde la otra orilla del East River.

"Nosotros queremos construir el socialismo; nos hemos declarado partidarios de los que luchan por la paz; nos hemos declarado dentro del grupo de países no alineados, a pesar de ser marxistas leninistas, porque los no alineados, como nosotros, luchan contra el imperialismo", destacó.

En una época donde América Latina sufría fuertes dictaduras, especialmente en el sur, el comandante "Che" Guevara llamó a alimentar la coexistencia pacífica entre todos los Estados, independientemente de su tamaño, de las anteriores relaciones históricas que los ligara y de los problemas que se suscitaren entre algunos de ellos, en un momento dado. "Queremos paz, queremos construir una vida mejor para nuestro pueblo y, por eso, eludimos al máximo caer en las provocaciones maquinadas por los yanquis", señaló. Asimismo, dejó claro que el Gobierno de Estados Unidos no cesaría en sus intenciones de acabar con la Revolución Cubana, para "hacernos pagar muy caro el precio de esa paz". Sin embargo, la respuesta fue contundente: "Ese precio no puede llegar más allá de las fronteras de la dignidad". Era el 11 de diciembre de 1964 y el entonces ministro de Industria de Cuba, de 36 años, hablaba en nombre del gobierno de La Habana ante la Asamblea General.

Su discurso sucedía al que antes, en 1960, había pronunciado allí Fidel Castro durante cuatro horas y 29 minutos, el más largo pronunciado en la historia de Naciones Unidas, reconocido en el Guinness World Record.

 

EL ATENTADO CRIMINAL

En la mañana, una voz anónima había llamado a la policía para decir que había colocado una bomba en la sede de la ONU, aunque las autoridades no encontraron ninguna señal de explosivo. Pero a las 12:10 PM una explosión removió el edificio y generó una estampida entre los manifestantes.

Un explosivo lanzado con bazuca (arma de uso militar por las FF. AA de los EE.UU. cruzó el East River desde la orilla de Queens, a la altura del parque estatal Gantry Plaza  hacia el edificio de la ONU, en el área de Turtle Bay, Midtown Manhattan, NYC. Iba dirigido hacia la parte trasera del edificio de la ONU, donde se encuentra la sala del Consejo de Seguridad, a pocos metros de donde tenía lugar el discurso de Guevara en la Asamblea General. Sin embargo, el cohete explotó a unos 200 metros del edificio, en las aguas del río, entre las islas Roosevelt y Belmont

Generó, no obstante, una onda expansiva que hizo temblar el edificio, rompió cristales y provocó olas que impactaron también contra la estructura, según describió en una crónica de la época The New York Times.

Se dice que alguno de los presentes creyó incluso que se trataba de un "temblor de tierra" o de un pequeño "tsunami".

De acuerdo con la crónica de The New York Times, la explosión y los gritos de la multitud que se encontraba al frente fue uno de los episodios "más extravagantes" desde que Naciones Unidas se trasladara a su sede en el lado este de Manhattan en 1952.

Fue, también, la primera vez que el edificio estuvo a punto de ser objetivo de un ataque. Pero aunque el impacto se sintió en la sala de la Asamblea, se dice que Guevara siguió impávido su discurso.

Luego afirmó que la explosión le había dado "más sabor" a lo que decía.

 

 

MARCO TEMPORAL

Las palabras del comandante Guevara se daban al finalizar el año 1961, en un contexto de abierta hostilidad estadounidense hacia Cuba.

El 3 de enero de 1961, el presidente Dwight David “Ike” Eisenhower, antes de entregar el mando presidencia a John Fitzgerald Kennedy, en uno de los últimos actos de gobierno cortó las relaciones diplomáticas de los EE. UU. con Cuba, dando abiertamente una clara señal de enfrentamiento.

El 17 de abril de 1961 comenzaron las operaciones de invasión en la Bahía de Cochinos (Playa Girón), desarrollada desde Nicaragua, donde una fuerza armada de 1.500 hombres, mayoritariamente cubanos entrenados en Guatemala, utilizando buques de la United Fruit Company, con el apoyo abierto de la CIA, fueron despedidos y arengados por el dictador nica Luis Somoza Debayle.

La invasión fue rechazada y al día siguiente quedaba en claro que el ejército cubano había controlado la situación. Fue entonces cuando la CIA pidió al entonces presidente Kennedy (quien aún no había llegado a los tres meses de presidencia) la intervención abierta de Estados Unidos, con despliegue de su Fuerza Aérea; propuesta que fuera rechazada por Kennedy. A raíz de ésta negativa, la comunidad cubana anticastrista en los Estados Unidos atribuyó públicamente al presidente Kennedy la calidad de traidor.

Meses más tarde Kennedy propuso una Alianza para el Progreso en la Conferencia de la OEA, que se desarrollara en Punta del Este, celebrada del 5 al 17 de agosto de 1961; alianza que consistía en un novedoso plan de ayuda masiva para el desarrollo de los países latinoamericanos. Era obvio que la Revolución cubana y el apoyo que le demostraba la población fueron el motivo que impulsara a los Estados Unidos a promover un plan cuyo objetivo declarado era reducir la pobreza y las desigualdades en el subcontinente. Cuba, representada en la ocasión por el “Che” Guevara, no se opuso en principio al plan estadounidense, pero sostuvo que era necesario primero que Estados Unidos permitiera el libre comercio de los productos latinoamericanos, eliminara los subsidios proteccionistas a sus productos y que se promoviera la industrialización de América Latina.

Con motivo la reunión de Punta del Este, Guevara se reunió con los presidentes democráticos de Argentina, Arturo Frondizi y Brasil, Jânio Quadros. Ambos fueron derrocados poco después en sendos golpes militares apoyados por Estados Unidos y en ambos casos, la reunión con el “Che” fue uno de los argumentos utilizados por los militares golpistas.

La ofensiva de aislamiento contra Cuba avanzó en enero de 1962 cuando los países americanos tomaron la decisión de excluirla de la OEA.

El 31 de enero de 1962, en Punta del Este, se celebró la Octava Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores de la OEA, más precisamente en la sala del Casino del Hotel San Rafael. Bajo la Secretaría General del uruguayo José Antonio Mora Otero, Cuba fue expulsada del organismo internacional. La reunión se realizó en Punta del Este para evitar las manifestaciones populares que se podrían haber dado en Montevideo y fue solicitada por el gobierno colombiano, quien luego de romper relaciones diplomáticas con la isla advirtió sobre la incompatibilidad de la permanencia de Cuba en el organismo internacional.

La expulsión de Cuba contó con la aprobación de 14 países, el voto en contra de Cuba y México y la abstención de Argentina, Chile, Brasil, Bolivia, Ecuador y Uruguay.

Las sanciones contra el gobierno de Castro reconfiguraron el mapa político del organismo, que venía acostumbrado a las unanimidades: por un lado México, Brasil, Argentina, Chile, Ecuador, Uruguay y Bolivia que se opusieron en mayor y menor grado a las sanciones contra Cuba y por otro Estados Unidos y las trece repúblicas que acompañaron su postura.

El fracaso de la invasión de Bahía de Cochinos (Playa Girón) fue la causa del despido del director de la CIA, Allen Dulles y su reemplazo por John McCone.

En noviembre de 1961 la CIA estableció un gigantesco programa llamado Operación Mangosta (Operation Mongoose), dirigido por Edward Lansdale, con el fin de organizar actos de sabotaje, terrorismo, asesinatos selectivos de los líderes cubanos, ataques militares e infiltraciones que desestabilizaran al gobierno cubano y lo llevaran al colapso para octubre de 1962. las acciones para encarecer y dificultar el transporte marítimo hacia Cuba, para provocar fracasos en las cosechas de alimentos y para impedir las ventas de níquel, entre otras. Durante la ejecución de la Operación Mangosta, en unos 14 meses se registraron 716 acciones de sabotaje de envergadura, sobre todo, dirigidos contra objetivos económicos.

Contemporáneamente se propuso la implementación de la Operación Northwoods (Operation Northwoods) dirigida a generar apoyo del pueblo estadounidense para una acción militar contra la Cuba de Fidel Castro, en el marco de la Operación Mangosta. El plan, que no se ejecutó, contemplaba varias operaciones encubiertas incluyendo actos de terrorismo de Estado real y simulados (como secuestros de aviones) en territorio estadounidense y cubano mediante ataques preparados para aparentar ser de origen cubano, con pérdida de vidas humanas en algunos de ellos. Considerándose fundamental para el plan el uso de "cubanos amistosos": exiliados cubanos que pretendían derrocar a Fidel Castro.

Como parte de las “tareas” de la Operación Mangosta, se ordenaba usar agentes biológicos y químicos para incapacitar a gran parte de la población y sobre todo, a los trabajadores, para impedir u obstaculizar los procesos productivos. Estas acciones de guerra biológica se comenzaron a desarrollar a partir de 1961, cuando Cuba sufriera el virus patógeno New castle, cepa velogénica (altamente virulenta) y tuviera que sacrificar casi todas sus aves y se siguieron desarrollando hasta los años ’90.

© Enrique F. Widmann-Miguel/IberInfo-Buenos Aires

 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

22 DE JULIO DE 1946: ATENTADO EN EL HOTEL KING DAVID, DE JERUSALÉN. DE LA MANO DEL SIONISMO NACE EL TERRORISMO MODERNO

FLORIDA (BUENOS AIRES-ARGENTINA), 1968. DOS CHICOS ASESINADOS Y OTRA OSCURA HISTORIA CRIMINAL

CERVEZA E HISTORIA